La ocupación ilegal de viviendas, también conocida como okupación, es un fenómeno que está aumentando de forma alarmante en la isla de Mallorca durante los últimos años. Los datos muestran un incremento constante en el número de viviendas ocupadas, sobre todo en determinadas zonas de la isla.
Este problema está generando grandes perjuicios tanto a los propietarios como a los residentes de las zonas afectadas.
Según las últimas estadísticas, en 2022 se registraron más de 800 casos de okupación ilegal de inmuebles en Mallorca, un 15% más que el año anterior. En 2023, las cifras no parecen ir a la baja. Las zonas más afectadas son Palma y municipios del litoral como Calvià o Andratx, donde se concentra la mayoría de las segundas residencias de la isla.
Los barrios con más casos detectados en Palma son El Terreno, La Vileta y El Molinar. En Calvià, las urbanizaciones con más okupas son Magaluf, Palmanova y Santa Ponça. Port Andratx y Camp de Mar encabezan las estadísticas en el municipio de Andratx.
El perfil predominante de los okupas en Mallorca es el de personas jóvenes en situación de desempleo y con escasos recursos económicos, un perfil que parece repetirse en otros puntos del país. Acceden ilegalmente a las viviendas para tener un lugar donde residir.
Algunos okupas proceden de la península, sobre todo de zonas como Cataluña o Madrid. Se trasladan a Mallorca atraídos por el clima y la posibilidad de okupar inmuebles vacíos, sobre todo en temporada baja.
La okupación ilegal acarrea graves consecuencias tanto para los propietarios como para el conjunto de los ciudadanos.
Los dueños de las viviendas okupadas sufren daños en sus propiedades, impagos de suministros y grandes dificultades para recuperar la posesión de sus inmuebles. Algunos propietarios, agobiados por esta situación, acaban vendiendo la vivienda okupada a un precio muy inferior al de mercado.
Por otro lado, la okupación genera problemas de convivencia, inseguridad y deterioro urbanístico en los barrios afectados. Los vecinos denuncian situaciones de insalubridad, ruidos, peleas e incluso delincuencia asociadas a las viviendas okupadas.
Ante el alarmante aumento de la okupación ilegal en Mallorca, las instituciones públicas y los cuerpos de seguridad están tomando medidas para atajar el problema.
El Govern balear aprobó en 2022 un plan de choque que incluye el refuerzo policial en zonas de riesgo, la simplificación de los desalojos y ayudas para adecuar infraviviendas deshabitadas.
Por su parte, muchos propietarios están instalando sistemas de alarma y seguridad para proteger sus inmuebles de posibles okupas. También es frecuente contratar los servicios de empresas especializadas en desokupaciones expres para expulsar de forma legal a los ocupantes ilegales.
Las fuerzas de seguridad recomiendan a los propietarios denunciar cualquier indicio de okupación tan pronto se detecte, ya que cuanto antes se actúe más probabilidades habrá de recuperar la vivienda con rapidez.
Aunque las medidas aplicadas por las instituciones parecen estar dando cierto resultado, las previsiones apuntan a que el problema de la okupación seguirá existiendo mientras no se incrementen las soluciones habitacionales para los colectivos más desfavorecidos.
Es necesario aumentar la oferta de vivienda social y asequible para evitar que los okupas potenciales vean la ocupación ilegal como única salida para acceder a una residencia. Las asociaciones dedicadas a la intermediación social abogan también por diseñar programas de acompañamiento que ayuden a los okupas a integrarse.
Mientras estas soluciones de fondo no terminan de implementarse, la okupación ilegal seguirá siendo una lacra que afecte negativamente a Mallorca. Por ello es importante que propietarios, instituciones y Fuerzas de Seguridad sigan trabajando de forma coordinada para minimizar un problema que parece haber llegado para quedarse.
Si tienes una vivienda vacía o segunda residencia en Mallorca, hay medidas prácticas que puedes tomar para dificultar su okupación:
Dado el problema creciente de la ocupación en España, en los últimos años han surgido empresas especializadas en la mediación pacífica, vigilancia y soluciones legales como Serviokupas.
Serviokupas es una empresa de desokupación en Mallorca que ofrece una variedad de servicios, incluyendo la detección de okupas, asesoramiento legal, procedimiento de desahucio y restitución de la propiedad. Para más información puedes preguntarnos o pedirnos presupuesto a través de nuestra página de contacto.
¿Cómo entran los okupas? Te vigilan durante un tiempo: el primer paso que siguen para hacer efectiva una okupación es recabar todos los datos posibles sobre la propiedad, en la Dirección de Urbanismo del Ayuntamiento, entablando conversaciones con las personas que viven en el área
