En los últimos años, el fenómeno de la okupación ha crecido en muchas ciudades de España. La presencia de ocupantes ilegales en una comunidad altera la convivencia, genera conflictos, e implica problemas para los propietarios de los inmuebles afectados.

Ante esta situación, desde Serviokupas, creemos que es importante que los vecinos conozcan qué medidas pueden tomar y cómo actuar de manera coordinada para enfrentar este contratiempo ¡Continúa leyendo!

Peligros y problemas generados por okupas en la comunidad

Cuando los okupas se instalan en una vivienda o en un local dentro de una comunidad, los vecinos experimentan una serie de inconvenientes que afectan tanto a la convivencia como al valor de sus propiedades.

A continuación, te describimos los principales peligros y problemas que surgen en estas situaciones.

Enganches ilegales a servicios

Uno de los problemas más graves que los okupas causan en una comunidad es el enganche ilegal a servicios básicos como la electricidad, el agua o el gas. Al no tener contratos formales con las compañías suministradoras, recurren a métodos clandestinos para abastecerse de estos recursos.

Esta práctica, aparte de ser ilegal, representa un peligro para todo el vecindario. Los enganches improvisados pueden derivar en cortocircuitos, sobrecargas en el sistema eléctrico o, en el peor de los casos, incendios.

La manipulación inexperta de las instalaciones de gas también puede generar escapes peligrosos, con riesgo de explosiones o intoxicaciones.

Desplome del valor de los inmuebles

La presencia de okupas en un inmueble no pasa desapercibida en el mercado inmobiliario. Uno de los efectos más directos es el desplome del valor de las propiedades en el edificio o vecindario.

Los potenciales compradores se muestran reacios a adquirir o alquilar viviendas en una comunidad donde estos invasores generan problemas de convivencia. Esto lleva a que la demanda en la zona baje significativamente.

Este descenso del valor es muy dañino para los propietarios que buscan vender sus viviendas, ya que se ven obligados a reducir los precios para encontrar compradores dispuestos a lidiar con la situación.

Generación de deudas comunitarias

Cuando los okupas se instalan en una vivienda dentro de un edificio, afectan a la comunidad de vecinos en su conjunto. Los inquilinos indeseados, no suelen pagar las deudas relacionadas con los servicios compartidos del edificio, como el agua de las zonas comunes, la electricidad que alimenta el ascensor o los sistemas de iluminación.

Al no contribuir con las cuotas de mantenimiento, se están beneficiando de estos servicios sin pagar por ellos, lo que genera un déficit que lo terminan pagando el resto de vecinos.

Esta carga financiera adicional incrementa las cuotas de la comunidad o incluso, pone en riesgo el mantenimiento del edificio al no haber fondos suficientes para cubrir los gastos.

 

Pasos legales para actuar contra okupas

Los vecinos deben conocer los pasos legales a seguir para abordar la situación de manera efectiva.

Es muy importante actuar conforme la ley para evitar problemas mayores y asegurar que las acciones tomadas sean efectivas.

1. Llamar a la policía y denunciar

El primer paso es llamar a la policía. Según la legislación española, si los okupas llevan menos de 48 horas en la vivienda, la policía puede actuar de inmediato para desalojarlos, siempre y cuando no haya ningún indicio de que residan allí de manera legal.

Pasadas esas primeras 48 horas, la situación se vuelve más complicada, ya que pueden alegar que han convertido la casa en su hogar. En este caso, la intervención de la policía no será suficiente, y será necesario recurrir a una denuncia judicial.

Realiza la denuncia lo más pronto posible para dejar constancia oficial de la situación y abrir un expediente que respalde futuras acciones legales.

2. Dejar constancia y pruebas

Toda acción legal que se emprenda debe estar respaldada por evidencias sólidas. Por ello, es recomendable, que los vecinos comiencen a documentar desde el principio cualquier actividad sospechosa.

Estas pruebas incluyen fotografías o vídeos de los daños ocasionados a la propiedad, los enganches ilegales a los servicios, las actividades ruidosas, o cualquier otra evidencia que refleje el impacto negativo de la ocupación en la comunidad.

3. Iniciar demanda judicial

Si la denuncia ante la policía no logra desalojar a los okupas, el siguiente paso es iniciar una demanda judicial. Este proceso es más largo, pero es el único camino legal para garantizar el desalojo de estos invasores.

Para iniciar la demanda, el propietario de la vivienda o el representante legal de la comunidad tiene que presentar una solicitud ante los tribunales, argumentando el allanamiento de morada y proporcionando las pruebas necesarias que respalden el caso.

Este procedimiento varía según las circunstancias del caso y de los tribunales involucrados. Se puede prolongar durante meses, sobre todo si los okupas presentan recursos legales o si se acogen a medidas que les permiten prolongar su estancia.

Por esta razón, recomendamos a los afectados que cuenten con el apoyo de un abogado especializado en estos casos, para recibir asesoramiento jurídico profesional.

4. Legitimación en junta de propietarios

La comunidad de vecinos también debe actuar de manera conjunta contra los okupas, lo que requiere que se convoque una junta de propietarios. Durante esta reunión, se debaten los problemas generados por la ocupación y las posibles soluciones.

La junta de propietarios es el órgano oficial de representación de la comunidad, y es aquí donde se toma la legitimación necesaria para emprender acciones conjuntas.

Acciones de la comunidad ante okupas

Aparte de los pasos legales, existen otras acciones que buscan resolver el problema de manera rápida, o prevenir futuros casos.

Negociación y desokupación express

Antes de recurrir a la vía judicial, los vecinos pueden intentar una negociación directa. Aunque esta estrategia no es la más recomendable, algunos vecindarios prefieren resolver el conflicto por ellos mismos.

La negociación consiste en llegar a un acuerdo con los residentes no autorizados para que abandonen la casa voluntariamente, a veces a cambio de una compensación económica o de ayuda para encontrar un lugar donde vivir.

En España, han surgido empresas especializadas en desokupación express, que actúan como mediadoras entre la comunidad y los okupas. En el caso de Serviokupas, contamos con un equipo formado por abogados y profesionales de seguridad, que trabajan de la manera más óptima posible.

Acciones preventivas y de protección

La mejor manera de evitar la ocupación ilegal es implementar medidas preventivas que protejan los inmuebles y la comunidad en general.

Aquí, te compartimos una serie de acciones preventivas a considerar:

• Instalar cámaras de vigilancia en las zonas comunes del edificio (entradas, pasillos, escaleras).
• Reforzar las cerraduras de las puertas principales y asegurarse de que todas las entradas están en buen estado.
• Evitar que las viviendas permanezcan vacías por largos periodos.
• Crear un fondo común para financiar mejoras en la seguridad del edificio, como la instalación de alarmas o la actualización de sistemas de seguridad.

Serviokupas: soluciones para comunidades ante okupas

Serviokupas nace ante esta creciente preocupación. Nos dedicamos a gestionar la desokupación de inmuebles de manera legal, asesorar a los vecinos sobre los pasos a seguir, intermediar en posibles negociaciones, y acompañar a los propietarios durante todo el proceso judicial. Si estás buscando una empresa desokupa en Málaga o una empresa desokupa en Madrid ¡llámanos!

Hemos realizado más de 3850 desalojos en los últimos años, y nos especializamos en la desocupación exprés de inquilinos morosos, precarios y ocupas ilegales.

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