Okupas en Barcelona
Situación de la okupación en Barcelona
La okupación ilegal de viviendas en Barcelona es un fenómeno que lleva años produciéndose, pero que ha experimentado un repunte significativo en los últimos tiempos.
Los vecinos y propietarios de viviendas se quejan del incremento de okupas en sus barrios y del perjuicio que esto les causa. Repasamos cuáles son las últimas novedades y datos sobre la situación de la okupación en Barcelona.
Aumentan las ocupaciones ilegales en Barcelona
Según las últimas estadísticas, en el último año ha aumentado en un 25% el número de ocupaciones ilegales de viviendas en Barcelona. Se estima que actualmente hay entre 500 y 1000 inmuebles ocupados ilegalmente en la capital catalana.
Algunos de los barrios más afectados por el fenómeno okupa son el Raval, Gràcia y el Eixample. Estas zonas reúnen un gran número de denuncias por usurpación ilegal de inmuebles. Dentro del Raval, el “Barrio Chino” acumula bastantes casos. El problema se agrava ante la presencia de narcopisos y el consecuente tráfico de drogas y presencia de toxicómanos.
Otros barrios dónde existe presencia de okupas es el de Gràcia, con presencia destacada en el entorno de la Plaza del Sol, y el Eixample.
Perfil de los okupas: jóvenes sin recursos
El perfil mayoritario de las personas que ocupan viviendas ajenas en Barcelona es el de gente joven, en muchos casos menores de 30 años, sin trabajo y con escasos recursos económicos.
Suelen organizarse en grupos para okupar las viviendas y en algunos casos recurren a profesionales que les asesoran sobre los aspectos legales para perpetrar la okupación. Los colectivos de okupas suelen tener motivaciones políticas y buscan denunciar con sus acciones la especulación inmobiliaria y la gentrificación.
Entre los okupas también hay una minoría de personas en situación de exclusión social que acude a la ocupación ante la falta de alternativa habitacional. Sin embargo, los okupas profesionales o por motivos políticos son mayoría.
Problemas para los vecinos de Barcelona
Los vecinos de los barrios con mayor presencia de pisos okupados denuncian problemas de convivencia derivados de esta situación. Entre las molestias más frecuentes destacan el ruido, el deterioro del entorno, la presencia de botellones y fiestas, tráfico de drogas o la inseguridad.
Los residentes se quejan de no poder descansar por el ruido hasta altas horas de la noche, de la acumulación de basura y suciedad en portales y calles, o de la sensación de inseguridad al tener que convivir con los okupas de sus fincas.
En algunos casos se han producido amenazas e intimidaciones por parte de los okupas hacia los vecinos que protestan por las molestias. Esta situación está generando malestar e indignación entre los residentes que ven impotentes cómo se degrada su entorno.
Perjuicios para los propietarios
Por su parte, los propietarios de las viviendas ocupadas sufren daños en sus inmuebles, impago de suministros y cuotas de comunidad, así como el perjuicio económico de tener sus propiedades invadidas.
Muchos dueños de viviendas usurpadas se encuentran con destrozos en puertas, cerraduras, tuberías, cableados e instalaciones eléctricas. También acumulan deudas por impagos de luz, agua y gas.
Además, no pueden alquilar ni vender el piso mientras siga ocupado y sufren la angustia de no saber cuándo podrán recuperar su vivienda y en qué estado. El proceso de desalojo judicial puede alargarse durante meses o años.
Plan municipal contra la ocupación ilegal
Ante el repunte de ocupaciones ilegales, el Ayuntamiento de Barcelona, en base a una ley aprobada en el Parlament de Cataluña, ha puesto en marcha un plan para luchar contra este fenómeno.
El plan incluye medidas como aumentar la vigilancia policial y presencia de agentes cívicos en zonas de riesgo, mejorar la coordinación entre administraciones para agilizar desalojos, implementar un nuevo protocolo de actuación para los casos de ocupación o crear una unidad específica contra la ocupación ilegal.
El consistorio trata de combatir el problema con los medios que tiene a su alcance, pero muchos expertos consideran estas medidas insuficientes dada la magnitud del fenómeno okupa en Barcelona.
Soluciones para frenar la ocupación en Barcelona
Aunque el plan municipal es un primer paso, se necesitan más acciones contundentes para frenar el problema de la ocupación ilegal en Barcelona.
Algunas posibles soluciones que se plantean son endurecer las sanciones legales contra okupas reincidentes, agilizar los desalojos judiciales limitando los plazos, tomar medidas preventivas de vigilancia en viviendas vacías o subvencionar la instalación de medidas disuasorias como alarmas específicas anti-okupas o puertas de alta seguridad.
Para prevenir ocupaciones, los propietarios pueden reforzar la seguridad de accesos con cerraduras anti-okupas, instalar alarmas específicas anti-intrusiones o contratar el servicio de una empresa de desokupación como Serviokupas para recuperar cuanto antes las viviendas invadidas.
La ocupación, un problema que se extiende en toda Cataluña
Más allá de Barcelona, el fenómeno de la ocupación ilegal de viviendas también crece en toda Cataluña. Según los últimos datos, en 2022 se produjeron en Cataluña más de 7.000 ocupaciones ilegales de inmuebles vacíos o deshabitados.
Las denuncias por usurpación y delitos contra el derecho a la vivienda se han disparado un 82% en los últimos 6 años en toda la comunidad autónoma catalana.
Cataluña ha aprobado normativas polémicas que otorgan cierta protección legal a algunos casos de ocupación, lo que está incrementando el problema según las asociaciones de propietarios.
Empresa antiokupas en Barcelona
En Serviokupas como empresa de desokupación en Barcelona y en otras ciudades de España, ofrecemos servicios de recuperación de viviendas y prevención anti-okupas. Contamos con un equipo de profesionales altamente capacitados en el ámbito civil, mercantil y penal, con el objetivo de brindar soluciones pacíficas y negociadas con los okupas y los inquilinos morosos.
Además, Serviokupas también disponemos de un servicio de asesoramiento jurídico y dispositivos de vigilancia modernos para evitar futuras ocupaciones ilegales. Con más del 80% de las desokupaciones realizadas en menos de 48 horas, Serviokupas es reconocida como una de las mejores empresas de desokupación en España.
